¿Qué significa “Reprocesamiento”?
Nuestro cerebro actúa como un procesador de datos pero, al contrario que un ordenador, estos datos no van solos, sino acompañados de sentimientos, sensaciones y creencias.
De manera que el “Procesamiento” que hacemos de las experiencias y situaciones de la vida contiene datos (realidad objetiva), sentimientos (emociones), sensaciones (síntomas y signos físicos) y creencias (pensamientos).
Cuando los sentimientos que acompañan a los datos son marcadamente displacenteros (ira, culpa, vergüenza, etc.) y las intensas sensaciones fisiológicas son malinterpretadas (catastrofismo, negativismo, pesimismo, etc.), formamos creencias limitantes (miedo, incapacidad, derrotismo, etc.) y el “Procesamiento” se vuelve disfuncional, deficiente, y tiende a generar trastornos mentales, psicológicos, emocionales o psiquiátricos.
El “Reprocesamiento” permite trabajar específicamente sobre la situación, el sentimiento, la sensación y la creencia que genera malestar y está en la base del trastorno, atacando así tanto los síntomas como la causa, lo que genera una marcada disminución del malestar y una rápida recuperación del trastorno.
¿Qué significa “Integración cerebral”?
La Integración Cerebral es el proceso por el cual el SNC regula la activación de las distintas estructuras encefálicas (corticales y subcorticales) de manera que funcionen como un todo organizado y armónico, promoviendo un desempeño más adaptativo y saludable para todo el organismo.
La realización de esta función básica de Integración la realiza el cerebro de manera autónoma y habitual (Auto-integración) cuando la percepción del entorno le permite sentirse seguro, cómodo, creativo, capaz, con confianza.
Si la percepción del entorno es marcada y continuadamente hostil o limitante, esta función básica de Integración (Auto-Integración) se dificulta o se detiene.
Las Técnicas de Reprocesamiento e Integración cerebral promueven o reactivan esta función básica de Integración, favoreciendo o desencadenando la recuperación del organismo de las distintas patologías en que se manifiesta la falta de Integración cerebral.
Una situación traumática en un periodo muy temprano del desarrollo tiende a producir una desintegración generalizada de la personalidad, y la esquizofrenia puede ser una manifestación de esto (autores de renombre en este campo y diversas escuelas coinciden en la conveniencia de considerar la esquizofrenia, mas que como una personalidad dividida, ya que puede confundirse con un trastorno disociativo de la personalidad, como una personalidad desintegrada) mientras que una situación traumática acaecida en un periodo posterior del desarrollo tiende a generar una desintegración parcial de la personalidad, que está en la base de los llamados Trastornos de Ansiedad.
En el momento en que la compleja maquinaria cerebral deja de funcionar integradamente, comienza a dar fallos que se manifiestan en trastornos y patologías.
¿Por qué elegir y probar Reprocesamiento e Integración cerebral en lugar de otras terapias más convencionales?
Son suficientes sólo 2-3 sesiones para que usted pueda emitir un juicio sobre si está satisfecho con las técnicas o no, sobre si desea continuar o abandonar (no existe ninguna técnica terapéutica que sea eficaz en el 100% de los casos) al contrario que en otras terapias más convencionales en que deben pasar meses para percibir el beneficio terapéutico.
¿Cómo es un tratamiento de Reprocesamiento e Integración cerebral?
- Se pide al paciente que focalice su atención en un “Campo del Pensamiento” (sentimiento, sensación, situación o creencia) donde reside una “Perturbación” (malestar).
- Se aplican estimulaciones táctiles y lumínicas indoloras que consiguen modificar las conexiones y activación de distintas estructuras encefálicas, reduciendo y muchas veces eliminando el malestar (“Perturbación”) asociado a este “Campo del Pensamiento” (sentimiento, sensación, situación o creencia).
¿Cuánto dura un tratamiento de Reprocesamiento e Integración cerebral?
El hecho de que yo, Pablo Pérez García, suelo trabajar combinadamente Técnicas Energéticas y Técnicas de Reprocesamiento e Integración cerebral en el tratamiento de los Trastornos de Ansiedad, debido a que considero este modo de trabajar de mayor eficacia en la resolución de este tipo de psicopatologías, el pronóstico que ofrezco es el mismo que expongo en la sección de Psicología Energética.
Un aspecto de una única “perturbación” ligada a un determinado “Campo del Pensamiento” puede ser resuelta en cuestión de minutos. Por ello las Técnicas Energéticas consiguen una alta eficacia tan rapidamente en algunos casos de Fobia Específica o Estrés Postraumático (TEPT) – trastornos que, a menudo, aparecen ligados a una única “Perturbación”– dándose casos en que el objetivo terapéutico se consigue en una sola sesión. El Trastorno de Angustia (Desorden de Pánico) sin Agorafobia y el Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG), así como algunas fobias y TEPT (ligados a varias “perturbaciones”) tienden a remitir en pocas sesiones (en mi propia experiencia he visto casos de Ansiedad Generalizada y Trastorno de Angustia remitir en 6 sesiones, así como Fobias Específicas en 2 sesiones). En el caso específico de la Agorafobia (que en la mayoría de los casos es una complicación del Trastorno de Pánico) puede bastar con 10 sesiones. En la Depresión, aunque la aplicación de las Técnicas Energéticas y su eficacia están menos estudiadas, yo mismo he observado cómo tras 6-8 sesiones la mejoría es notable en algunos casos. Por otro lado he de decir que la marcha con que evoluciona un trastorno es muy variable, ya que no hay dos personas iguales ni dos sesiones de psicoterapia iguales, y que la manifestación de la patología no es la patología en sí misma, de manera que lo aparentemente similar puede tener trasfondos muy distintos y esto es lo que decide cómo y cuando remitirá el trastorno.
¿Quién está capacitado para ofrecer un tratamiento de Reprocesamiento e Integración cerebral?
La aplicación eficiente de estas técnicas implica un conocimiento amplio en neuroanatomía y neurofisiología, por lo que es muy recomendable que sea un psicólogo o un psiquiatra con formación especifica en estos campos quien esté a cargo del tratamiento. Además, una buena aplicación de este tipo de tratamiento conlleva un dominio sobre los rudimentos técnicos que se adquiere con la practica continuada y esforzada. Por ello la experiencia en psicoterapia de Reprocesamiento e Integración cerebral es fundamental.
Pablo Pérez García es Licenciado en Psicología, colegiado en Asturias O-2138, Postgraduado en Psicopatología y Salud, Graduado en Técnicas de Integración Cerebral (TIC) en Buenos Aires en 2006 y viene utilizando estas técnicas diariamente durante los últimos años en la atención psicoterapéutica de sus pacientes, siendo por ello un profesional de referencia en Asturias en el campo de la terapia de Reprocesamiento e Integración cerebral.
¿Cómo funcionan mejor las Técnicas de Reprocesamiento e Integración cerebral?
Debido a que las Técnicas de Reprocesamiento e Integración cerebral actúan sobre la “Perturbación” a través del Sistema Nervioso Central y las Técnicas Energéticas actúan sobre la “Perturbación” a través del Sistema Nervioso Periférico, unidas constituyen una vía doble de acción que genera un excelente beneficio terapéutico, lo que hace muy recomendable su utilización conjunta.
¿Se pueden aprender estas técnicas para auto-aplicación?
La base sobre la que es apoyan estas técnicas es la siguiente: la estimulación bilateral alterna, cuando el paciente esta concentrado en un “Campo del pensamiento”, genera una integración de este, lo que permite una reducción y en muchos casos una desaparición de la “Perturbación” responsable o co-responsable de determinado trastorno.
Aunque las actuales Técnicas de Reprocesamiento e Integración cerebral entrañan cierta complejidad, la estimulación bilateral alterna se encuentra en técnicas terapéuticas ancestrales (como algunas prácticas del yoga) y en actos cotidianos de las personas (como el dormir y el pasear) por lo que una adecuada didáctica permite a la persona comprender la base teórica y formas simples de estimulación bilateral alterna que puede aprender para auto-aplicación en el mismo desarrollo de la terapia.
Pablo Pérez García, Psicólogo O-2138
Experto en Psicopatología y Salud
Graduado en Técnicas de Integración Cerebral
Teléfono: 629835699
Mail: pablo@akapsico.com
La psicoterapia de Reprocesamiento con Técnicas de Integración Cerebral (TIC), produce una mejoría notable en el tratamiento y pronóstico de las personas aquejadas de trastornos fóbicos respecto de un abordaje desde una perspectiva cognitivo-conductual.
Desde la orientación cognitivo-conductual el tratamiento para fobias consta básicamente de Reestructuración cognitiva, entrenamiento en relajación y exposición.
La Reestructuración cognitiva tiende a ser el primer paso en el tratamiento de la fobia desde una orientación cognitivo-conductual. Se trata de, a través del diálogo, hacer ver al paciente lo irracional, inconveniente e insatisfactorio que resultan sus reacciones fóbicas.
Sin embargo hoy sabemos que la conducta fóbica no está necesariamente mediada por la corteza cerebral, sobre la que incide la reestructuración cognitiva, de manera que este paso puede ser sumamente ineficaz. Recientes investigaciones en neurofisiología nos informan de que las estructuras amigdalinas, máximas responsables subcorticales de desencadenar reacciones emocionales negativas, principalmente el miedo, inciden sobre el hipotálamo, máximo responsable de desencadenar la respuesta neuroendocrina, a través de la cual llegamos a experimentar las sensaciones corporales características (aumento de la frecuencia cardiaca, aumento de la presión sanguinea en las extremidades para huir, parálisis en algunos casos, etc.) por dos vías distintas: una, a través de la corteza, por la cual el razonamiento, y por tanto la reestructuración cognitiva, sí mediaría en la respuesta de miedo-huida; y otra directa, que no pasa por la corteza cerebral y sobre la que, por lo tanto, no tiene ninguna capacidad de acción la corteza cerebral ni tampoco la reestructuración cognitiva del enfoque cognitivo-conductual. Esta vía directa que conecta las estructuras amigdalinas con el hipotálamo se activa en situaciones de emergencia, en las que el organismo entiende que no hay tiempo suficiente para pensar detenidamente sobre qué respuesta sería más conveniente y cuál menos, es decir, es la vía preferente de conexión estructuras amigdalinas-hipotálamo de las respuestas fóbicas, en las que la reacción al estímulo fóbico es inmediato y la necesidad de evitarlo imperante.
Esta es una razón de peso para entender porqué la reestructuración cognitiva y el enfoque cognitivo-conductual en el tratamiento de las fobias ofrecen resultados muy inferiores a los que ofrece el Reprocesamiento con Técnicas de Integración Cerebral (TIC).
Por otro lado, en la mayoría de los casos, la persona ya reconoce la irracionalidad de su conducta fóbica y, a pesar de ello, no puede evitarla. Esta es una razón por la cual la reestructuración cognitiva puede resultar tediosa para el paciente en cuanto que el psicólogo de orientación cognitivo-conductual está tratando de hacerle ver algo que ya sobradamente comprende.
Pablo Pérez García, Psicólogo, Experto en Psicopatología, Graduado TIC.
Técnica de Un Ojo Por Vez
El método “Un Ojo Por Vez”, desarrollado en 2000 por los canadienses Autrey Cook, PhD. y Richard Bradshaw, Phd., consiste en observar el problema a resolver con un solo ojo alternadamente (se tapa el otro), activando también los hemisferios cerebrales por separado. Se pueden buscar dos cosas:
Superar el shock para desensibilizar el trauma
1.- El “shock” o incredulidad acerca de lo ocurrido, habitual en situaciones altamente traumáticas. Su resolución es la única manera de poner en marcha la desensibilización del trauma. A menudo se observa que con uno de los hemisferios la persona “cree” lo que le ha pasado, pero con el otro “no lo puede creer”. Es decir, lo sabe con el cerebro pero lo niega el corazón. Su discurso está plagado de “no lo puedo creer”, “¡es imposible!”, “me voy a despertar y todo habrá sido un sueño”, etc.
El Tiempo no importa si no superamos el Estrés Agudo o el Sock
Mientras esta incredulidad persista, no importa cuanto tiempo haya pasado desde el hecho, es imposible la elaboración y la integración en la vida del sujeto de las consecuencias de la situación. Es como si no existiera el tiempo. Resolviendo la incredulidad, en poco tiempo de trabajo se logran resolver situaciones que podrían llevar años congeladas y perturbando.
Un cerebro traumatizado es un cerebro entumecido, desligado de la realidad
El cerebro en estado de estrés libera hormonas a través del torrente sanguíneo. Estos químicos constriñen los capilares exteriores del sistema vascular, centrando el abastecimiento de sangre en el área del pecho y en los músculos largos del cuerpo, que están involucrados en la lucha-huida. Este mismo proceso se da en el cerebro. Los capilares exteriores se constriñen, centrando el abastecimiento de sangre en las áreas que tienen que ver con la supervivencia. La sensación de “entumecimiento” que aparece cuando el sujeto está en estado de “shock” o estrés significa que el cerebro se ha “desensibilizado” a sí mismo para prepararse para la supervivencia.
Con este desequilibrio viene la incapacidad de pensar claramente. Se desactiva el cerebro anterior, corteza pre-frontal (área creativa, que permite nuevos aprendizajes) y se activa el cerebro posterior (occipital) que toma el mando.
A través del Ojo accedemos a la Corteza Visual
2.- El otro hallazgo es el de la presencia de ciertos puntos en el campo visual, llamados “nudos”, que aparecen al hacer recorrer con la mirada de un ojo por vez y lentamente todo el campo visual mientras la persona piensa en el hecho. En estos nudos se concentran curiosamente las emociones más disfuncionales, que aparecen ligadas a emociones físicas, como mareos, nauseas y ansiedad. Una vez disueltos estos “nudos”, con una técnica apropiada, el problema comienza a ser procesado y a desaparecer, o se reduce a su mínima expresión.
Solvey & Solvey, Terapias de Avanzada, Argentina, 2007.
Pablo Pérez García
Psicólogo, Coleg.: O-02138
Graduado TIC
pablo@akapsico.com
Tfno.: 629835699