Psicología Energética y Transmisión por Ondas
Por definición, “onda” en el campo de la física se entiende por “propagación de una perturbación de alguna propiedad de algún medio”.
Ejemplos de propiedades son la densidad, presión, campo eléctrico o campo magnético.
El medio perturbado puede ser el agua, el aire, un trozo de metal, el espacio o el vacío.
La propagación puede ser longitudinal, cuando la vibración es paralela a la dirección de propagación de la onda (los sonidos son ejemplos de ondas longitudinales) o transversal, cuando las vibraciones son perpendiculares a la dirección de propagación de la onda (como las ondas electromagnéticas: radio, microondas, infrarrojos, luz visible, ultravioleta, rayos X y gamma).
Cualquier cambio en cualquier propiedad de determinado medio representa una perturbación respecto del estado anterior. La onda transmite o propaga información sobre las características del cambio o perturbación acaecida.
Una emisora de radio codifica la información, que se trasmite en forma de ondas mecánicas a través del aire, que a su vez son descodificadas por el receptor o aparato de radio doméstica.
En el cuerpo humano se realizan continuamente procesos similares: una célula o agrupación de ellas experimentan un cambio o perturbación en su estado, lo cual es transmitido a través del medio extracelular y recibido por las proteínas integrales de membrana (PIM) de otras células. Estas PIM funcionan a modo de “antenas” que no sólo responden a señales físicas (estrógenos, histamina, insulina, etc.), sino también a campos de energía ondulatoria (ondas).
Pablo Pérez García.
Psicología Energética.
Bibliografía de Referencia